Vida y obra del Padre Víctor Vinces
Al fundador de el Santuario de Jesús Miserdicodioso
Vincens nació el
18 de noviembre de 1915 en Levanska Varosh, Croacia. En el seminario de Travnik
realizó sus primeros estudios, junto con su hermano mayor, José, que
estaba cursando cuarto año. De allí pasó al seminario mayor de Sarajevo.
Pocos años después, llevado por su profunda fe religiosa, ya decía las homilías
en la Parroquia de Goyani, donde su hermano era párroco, y en la Catedral de la
capital croata. El 30 de abril de 1939 fue ordenado sacerdote por Monseñor
Sario y durante un tiempo fue teniente cura de Modrich, centro industrial de
Treslich.
El 15 de abril de 1945
fue enviado como cura párroco a la localidad de Ostra Luka, en la cuenca del río
Saba, y cuando el pueblo fue invadido por las fuerzas populares Vincens fue
tomado prisionero y llegó a enfrentar un pelotón de fusilamiento. Enterados
sus feligreses de estos hechos, formaron un grupo de 80 personas que,
sorprendiendo a los guardias, lo pusieron en libertad y lo ayudaron a ocultarse.
La situación se tornó grave y sus seguidores decidieron abandonar sus hogares,
poniéndose en marcha con el Padre Víctor a la cabeza. En bicicleta recorrieron
700 kilómetros hasta llegar a Italia, donde fueron internados en un campo de
concentración en la ciudad de Fermo, provincia de Le Marche. Allí
permanecieron más de dos años, sufriendo todo tipo de privaciones pero
atendiendo la vida espiritual de sus paisanos.
Aquí
nuevamente cabe destacar la labor de sacerdotes y frailes que en esta tercera
etapa supieron dar su apoyo moral y espiritual en los momentos más trágicos de
la existencia de un pueblo. Se impone en primer lugar nombrar a Don Viktor Vincens,
popularmente conocido como Padre Ošini, quien llegó en diciembre de 1947 con
los primeros grupos de refugiados. Para el 31 de diciembre, a pocos días de
haber desembarcado, celebra el primer Te Deum al aire libre en el
entonces en construcción Barrio Perón, donde la mayoría de los operarios eran
croatas. Al día siguiente, para Año Nuevo, celebra la Santa Misa acompañado
por el coro iniciado en el campo de concentración de Fermo, y que aún hoy,
renovado en sus miembros, actúa bajo el nombre de Coro Croata Jadran. Sigue
asistiendo a los croatas y al colegio de las hermanas croatas, pero también
atiende a la feligresía local como capellán de la parroquia Cristo Rey. Luego
es trasladado a la parroquia Nuestra Señora del Carmen en el barrio de Urquiza,
y se hace cargo del Oratorio Betania del Sagrado Corazón, posteriormente
convertido en parroquia. En su tarea de mantener unidos a los croatas edita un
boletín "Ave".
El
Padre Víctor Vincens, hombre de importante talla alrededor de dos metros y con
una característica personal de tipo sajón, es decir de acuerdo a la
idiosincrasia nuestra de carácter tosco y fuerte, pero de corazón muy sensible
y dispuesto a ayudar al prójimo, prontamente se integra y capta con su estilo a
la comunidad ya sea cristiana o no.
La
personalidad del Padre Víctor y su ejemplo de vida cristiana,
austera, sufrida y cálida pese a las circunstancias que le toco vivir en
su tierra Croacia de la cual tuvo que emigrar en forma compulsiva, al ser
anexada la misma bajo el régimen comunista
del Mariscal Tito a Yugoslavia, dejando su familia, y, su posterior
estadía en un campo de concentración en Italia, obviamente no mellaron
su carácter sino por el contrario fortaleció
su sacerdocio aceptando los designios de Dios, ya que según dijo en su
oportunidad cuando vino a la Argentina esperaba
dedicarse y estar con la Comunidad Croata, no obstante lo cual acepto la
misión que la Curia le había asignado en la Parroquia de Nuestra Señora del
Carmen.
PARROQUIA
NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN
El
párroco, Ponce de León, a raíz del
extenso territorio de la parroquia, y
la necesidad de cubrir la demanda espiritual debido al importante
crecimiento habitacional, determina la fundación de cuatro (4)
oratorios, para la mejor atención de
la feligresía, designando para su
atención a los sacerdotes, Silva,
Maidana, Veneziale y Vincens.
ORATORIO
BETANIA DEL SAGRADO CORAZÓN
En
el inicio se hace cargo del
Oratorio Betania Del Sagrado Corazón que funciona en una casa donada a la
Iglesia y habitada, por la familia Dourrón de origen francés, compuesta por
los hermanos Sara, Delfina, Esther, las cuales eran solteras y dedicadas por
entero a la Causa de Cristo y los hermanos Juan y Horacio, juntos con ellos vivía
la Srta. Feliciana Coronel, quien
había sido criada por esta familia, todos
ellos actuaron activamente, en este
emprendimiento. Las hermanas Sara, Delfina y Esther, realizaban entre otras
tareas la función de catequesis y Horacio, era quien se encargaba de comentar
la santa misa que rezaba el Padre Víctor
Vincens. Juan que vivía en la zona de Palermo ayudaba con el padrinazgo de
ciertas actividades.
La
Srta. Feliciana virtuosa y piadosa
mujer era quien se encargaba de la cocina, tenía un carácter especial siempre
alegre y de espíritu inquieto se puede decir a pesar de su edad avanzada como el resto de la familia, que eran incansables en
los diversos trabajos que emprendían.
La
casa estaba ubicada, en la calle (Bebedero)
Dr. Pedro I. Rivera Nº
4755,era de las considerada tipo chorizo, en un lote de 10 X 40,
la componía un pequeño jardín de entrada. Tres habitaciones continuas,
baño, cocina y pieza de servicio, toda esta edificación ocupaba el ala
izquierda, el ala derecha la
constituía un primer, patio y un segundo más
pequeño, dividido por una pequeña pared y finalmente un fondo. En la parte
final del fondo y como era común en
esa época existía un gallinero.
Al
principio se realizaron tareas de catecismo y luego una misa dominical,
las primeras se realizaron en la habitación de 4 x 4 que la familia
Dourrón utilizaba como comedor, era la primera de las piezas que daba al jardín
de entrada, participando un muy reducido grupo de personas, como altar se utilizo un modular. Luego al ir acrecentándose
la cantidad de asistentes, se realizaba en el patio, en un humilde altar de
madera, construido por un carpintero italiano
de la zona de apellido Ardia, cuya carpintería estaba instalada en la
Calles Dr. P. I. Rivera y Avd. Álvarez Thomas.
Como
el patio era descubierto y se acrecentaba la concurrencia se coloco un toldo de
lona, en invierno para contrarrestar el frío que ciertamente era muy crudo con
relación al actual, dado que era muy común la existencia de sabañones, se
encendían para paliar él frió, el carbón y/o leña en varios tachos. Como no
existían bancos, se utilizaron simples sillas, al poco tiempo se consiguieron
algunos bancos cedidos por la
iglesia del Carmen.
Las
actividades se fueron desarrollando, se puede decir en formar vertiginosa,
debido al entusiasmo de la vecindad asistente, fue numerosa la concurrencia de
chicos, dado que en esa época era
habitual, que los mismos jugaran en la calle, de inmediato surgieron equipos de
fútbol y básquet, el entusiasmo fue tal, que se nombro
para financiar y dirigir los eventos un padrino, que fue Juan Dourrón,
para la compra de elementos deportivos, inclusive el de un rifle de aire
comprimido, que siempre recuerdo por la cola en espera
que hacíamos entre nosotros para poder tirar un tiro.
Los
chicos participantes eran de
aproximadamente 9 a 13 años, de
los que recuerdo Caruso, los hermanos Potenzo, los hermanos Bonari,
Osvaldo,Dunan,
Humberto
Cardozo, Luis Durron, los hermanos Otero, José Gago, Navas, Cauxilio, Pinki
Valenzuela, etc.
En
medida que se fue conociendo la existencia del Oratorio y la devoción a JESÚS MISERICORDIOSO, que aún no estaba
oficialmente autorizada pero que ciertamente desbordaban las limitaciones
impuesta, se empezó a hacer numerosa la concurrencia. Para
unir a los amigos del Oratorio se edita la Revista "Chispas de Amor".
A
grande rasgos, las familias fundadoras que recuerdo eran, González, Ares,Arpe,
Renzi, Richieri, Nahin, Valenzuela, Viola, Otero, Ambrosetti, Gallardo, Durante,
Ferez, Bonari, Bonano, Potenzo, Galichio, Pachi, Caruso, Murthag, Zaenz, Benasi,
Berreta, Demarco, Urejola, Paladino, Acosta, Silva, Castro, Urejola .Urcola,
Ponce, Navas , Alegre, Famat,
Logullo, etc.
Las
Instituciones que surgieron en ese entonces
fueron: Congregación Mariana,
Grupo de Scout para menores a cargo de Luis Durrón, y Apostolado de la
Oración para mujeres, Liga de Madre
de Familia. Luego pasado los años
y por extensión de la Iglesia Nuestra Señora de Lourdes, de la calle
Monroe, y a cargo de los
legionarios de Maria, Riki, Ernesto Luraski , Roberto Atencio, Kico,
Susana Cripeo, etc. se
fundaron dos presidium de la Legión de Maria, uno para Jóvenes y otro
para Adulto.
La
construcción del un
templo, en el predio en cuestión, que resultaba por cierto a futuro chico, fue
realizado con característica muy especiales, dado que en el mismo debía
dejarse determinados espacios que permitiera contar con dependencias para las
diversas actividades, como así también ante el hecho de que también
en el mismo predio debía asignarse la comodidad habitacional necesaria a
las señoritas Dourrón que eran de
edad avanzada y donantes del predio en cuestión.
Bajo
este esquema de situación, se proyectó y planifico, el templo, el que era
dividido con puertas corredizas, para las funciones ajenas a las ceremonias
religiosas, con la secretaria en la entrada, viviendas de las señoritas Dourrón,
arriba y al contrafrente vivienda
para el sacerdote actuante.
Previamente
fue demoliéndose parcialmente la casa en medida que se iba construyendo,
teniendo en cuenta que en la misma vivía las señoritas y se debían proseguir
con la función propia del Oratorio, todo el material proveniente de la demolición
era reciclado para la nueva construcción.
Me
acuerdo del riesgo que corrimos tres o cuatro
jóvenes, al demoler junto
con el padre paredes de la casa vieja y de cómo el padre al tener que hacer una
diligencia nos dijo que descansáramos y esperáramos su regreso
para proseguir con los trabajos, nosotros no le hicimos caso y seguimos
por nuestra cuenta pues le queríamos dar la sorpresa para cuando volviera de
que ya la habíamos tirado a bajo. En esos estábamos cuando de pronto sé cayo
toda la pared de un largo de varios metros y sostenida por vigas que asentaban
en la medianera, salimos corriendo
cuando vimos venir que se nos venia todo en cima, uno de los muchachos al que
apodábamos por el sobrenombre de Lavandina (Humberto Cardozo), quedo bajo los
escombros y una viga de madera le
había golpeado la cabeza, el ángel
de la guarda evidentemente lo protegió de una manera especial, para que la cosa
no fuera de gravedad, se había
puesto ante de la demolición un casco de soldado que había aparecido entre las
cosas donadas y que lo protegió del golpe, quedo por un rato tendido en el
suelo pero no paso a mayores. Al regreso del Padre Víctor y ver lo que habíamos
hecho no sabia si matarnos o agradecernos.
Cada
uno en cierta manera tomaba determinada responsabilidad, como el caso de la Sta.
Olga y Amanda González a las
tareas de distribución de fondos y
de orden administrativo. Las clases de catecismo estaban a cargo
de las Señoritas. Delfina Dourrón y Esther,
Clara Valenzuela, Teresa, González, etc.,. El canto en ceremonias y
misas a cargo de la Sra. de Ares y de Otero entre otras personas.
Como
monaguillo y por largos años, los señores Acosta , Arpe, Jorge Cernuda, Castro
etc. y redactores de las misas Horacio Dourrón, Sorba, etc.
Después
de Misas las señoras de la liga de Madre de Familias vendían prendas y /o
comidas que las mismas
confeccionaban y elaboraban, cuya recaudación si bien no era muy significante
sumaban.
La
Secretaría y las coletas por lo
general eran realizadas por la Sta.
Beatriz
La
señora de Viola y su marido que acudían dominicalmente trajeron de Portugal
una replica de la Virgen de Fátima, la cual luego por muchos años visitaba los
hogares que la solicitaban.
Don
Luis Nahín y su señora esposa de sobre nombre Peta e hijas, fueron en esos
albores y con posterioridad,
pilares fundamentales en la vida del Oratorio, tanto por el ejemplo cristiano
como así también en las iniciativas que se emprendían y muy queridas del
Padre Víctor.
Los
fondos necesarios para el comienzo surgieron de la Santa Providencia, colectas
de las misas, donaciones anónimas etc., pero principalmente el padre Víctor,
mientras tanto y junto con feligreses, recurrían para lograr fondos que le
permitiese concretar la obra, a la junta de papeles, cartones, diarios,
botellas, vidrios, trapos y de todo elemento que luego se pudiera vender. El
material en cuestión era retirado de los domicilios o recogidos de la vía
publica, como así también eran recibidos en el Oratorio.
En poco tiempo el predio con la construcción y sumado al acopio de
materiales parecía un deposito, la gente aportaba de todo. Realmente se puede
decir que el Padre Víctor fue el primer Cartonero y sacerdote de la zona que
implementaba esta metodología, ya que no era común que la gente recogiera
elemento de la basura y menos un Ministro de la Iglesia. Pero este procedimiento
de financiamiento le permitía afrontar los gastos sin requerir específicamente
a la feligresía fondos para los emprendimientos.
Con
determinados grupo de feligreses se
seleccionaba los materiales para lograr mayor valor es decir se separaban los
vidrios, el bronce, cobre, diario, cartón, trapo etc. Las prendas que podían
ser utilizadas se las cedían a los necesitados. Había muebles y elementos por
todo lado.
Obviamente
la situación descrita, aparejaba cierta critica por parte de determinadas
personas, dada la imagen que provocaba la acumulación de los elementos, pero
gracia a los mismos y a su aprovechamiento, el padre Víctor proseguía con la
obra, sin que nunca pusiera en situación difícil, como solía decir,
a los
feligreses, por solicitud de
contribución para la prosecución
edilicia.
Así
como sembraba, también cosechaba, pues hubo muchos comerciantes no
practicante algunos, que se sensibilizaron con su ejemplo y no escatimaron
esfuerzo para ayudarlo, como ejemplo la familia Ferez de la Panadería el
Mercurio, el Corralón de Colla Hnos., el Establecimiento Metalúrgico Mimbie de
Don Ángel, la Marmolería de Pachi, la
casa de Electricidad del Automóvil, la Carpintería de la familia Ardia, etc.
El
padre Víctor debido a problemas en la planta de sus pies, según se decía,
(originadas por motivo de la guerra), caminaba con cierta dificultad,
por tal motivo usaba para desplazarse
una bicicleta, especial, debido a su talla y peso. Lo cual con la sotana puesta
llamaba mucho la atención en el
vecindario, algunos lo saludaban cariñosamente y otros se burlaban
llamándole “Cuervo” sobre
todo en la época en la que existió un enfrentamiento entre el Gobierno y la
Iglesia, razón esta que motivo que ciertos sacerdotes vistieran de civil, pero
el Padre Visto seguía en lo suyo
vistiendo su larga sotana.
Al
tiempo fue necesaria la compra de
un triciclo de almacenero para el traslado de los elementos recogidos al
Oratorio y/o al depósito donde se los venida,
el mismo era manejado por los jóvenes y un albañil de nombre
Silvano , que participaba de la demolición del edificio.
Para
coadyuvar en los gastos, se determino entre otras medidas, la creación de un
registro de 100 personas que se comprometía voluntariamente y mensualmente ha
aportar determinada cantidad de
dinero que se identifico como Circulo de Amigos del Oratorio.
Entre
otras actividades se realizaron en reiteradas oportunidades Peregrinaciones a
Lujan, Santos Lugares, etc, como así
también festivales, kermeses, con premios que aportaba la feligresía,
comerciante de la zona, los puestos eran atendidos generalmente por jóvenes,
Obras Teatrales, como el ballet
folklórico de Beatriz Durante, asados, etc.
Verdaderamente
la comunidad que asistía era por
demás heterogénea pues estaban los católicos practicante, y los que no lo
eran pero por la atracción de la
personalidad del Padre Víctor, se acercaban como los casos de la Funeraria que
existía enfrente “Usal Hnos.”, el cual
sabia asistir a los almuerzo del salón pero no a la misa, en una
oportunidad dijo en la familiaridad que nos asistía a todos: “Yo no quiero que
muera nadie pero tampoco que me falte el pan” y/o como la de un italiano
llamado Galli, que le faltaba una pierna con motivo de la guerra, pero de
importante musculatura y la sabia desafiar al Padre Víctor por una pulseada.
Muchos de los que asistieron a estos actos sociales luego además de creyentes
fueron activos practicantes.
Constantemente
el Padre Víctor, recababa de su feligresía en todos los actos religiosos el
debido comportamiento y por sobre todo en cuanto a la vestimenta que debía
guardar el debido respecto cristiano.
En
ese andar el Padre Víctor no descuidaba para nada la parte espiritual de su
feligresía de forma que la misma se fue acrecentando, dando a conocer el
Mensaje de Cristo en los actos religiosos como así también en los demás actos
sociales y de simple amistad vecinal y/o circunstancial.
Los
responsables profesionales de la
obra fueron el arquitecto
Caputo e Ing. Galichio,
los materiales se adquirían a los corralones de Los Hermanos Colla y , los
feligreses también participaban
junto con el padre Víctor en todo tipo de tareas de albañilería,
grandes, chicos hombres y mujeres, con los correspondientes agotamiento físicos,
pero con la alegría de que bien
valía la pena el esfuerzo por, la causa de Jesús.
Se
utilizaron para su construcción todo material proveniente de la casa, se
limpiaban pacientemente los ladrillos y se los volvía a colocar, ya sean enteros o mitades, este quehacer era
desarrollado por todos inclusive chicos de muy corta edad, como el caso de
Alicia Nahum. cada uno colaboraba
de acuerdo a sus posibilidades, preparando mezcla a pala, haciendo pozos para
las bases, etc.
Como
piedra fundamental y para
testimonio de generaciones futuras, se colocó en una de las bases de la columna
de entradas, un pedazo de caño de
plomo, conteniendo un pergamino con los nombres y firma de los que actuaron en
el emprendimiento y monedas de esa época.
Con
el tiempo el entonces Oratorio de
Betania del Sagrado Corazón, debido a la expansión desarrollada,
y por disposición de la Curia, paso
a ser parroquia, designando el episcopado como párroco al padre Víctor
Vinces, surgiendo entonces la parroquia de Jesús misericordioso.
El
Centro Comerciante de Villa Urquiza, colaboraba activamente, por impulso de su
presidente don Luis Nahin. El
Centro en cuestión por ejemplo llegar
destinaba la recaudación de un
determinado puesto de la kermés, que el centro realizaba para su institución,
con motivo de la construcción de su sede en
el predio del ferrocarril Urquiza y/o en su propio predio, ubicado en la Adv..
Congreso.
Corresponde
destacar también a la familia de
Alberto Demarco, su señora esposa Rosa y su hijo José Luis, quienes
colaboraban activamente.
La
edificación del templo, fue realizada con
grandes esfuerzo, en forma paulatina y de acuerdo a las posibilidades económicas,
de forma que para su finalización demando un tiempo prolongado, tiempo este que
se transformo en años, la concurrencia siempre se fue acrecentando, por lo que
el padre Víctor oficiaba una misa
diaria, y tres el día domingo. Los días sábados oficiaba a la tarde, la misa
vespertina del domingo, el padre Enrique
sacerdote jesuita (croata) quien venia de la iglesia del Salvador.
Para colaborar
con la parroquia.
El
día domingo le resultaba al padre Víctor, sumamente agotador, pues junto a las
tres misas debía atender las
confesiones que a veces se realizaban, no obstante la recomendación de que se
realizara con debida antelación, en día de semana, se presentaban casi sobre
el horario de inicio de
las misas, esta tardanza provocaba en determinadas personas cierto enojo,
pero el padre respondía que tuvieran un poco de paciencia pues no se podía
dejar de atender a una persona que en ese momento y por razón que solo Dios
conocía, decidía arreglar sus cuentas con el.
Respecto
a su alimentación diaria al principio se encargaba de ello las Srts. Dourrón,
pero luego al fallecer estas, ciertas señoras como ser Irene de Castro y Rosa
Demarco se encargaban de ello,
asimismo las hermanas del Colegio de Croatas, sabían cada tanto traerle comida
de su terruño y sino se abastecía por propio medios.
Por
su parte las señoritas Dourrón, Sara, Delfina y Esther, dieron todo, hasta el
fin de sus días y la señorita Feliciana también de edad avanzada que había
sido criada por la familia Dourrón y se desvivía ayudando a los demás, era
quien cocinaba para todos, asimismo solía
aplicar inyecciones a quien lo solicitaba sin ningún tipo de recompensa,
fue lo que se dice una santa mujer, muy querida por todos, su muerte provoco en
su momento gran dolor en la feligresía, pues siempre y en muchas necesidades
era ella la que centraba y sabia resolver situaciones de diversas índole,
iniciaba su tarea a las seis de la mañana y la finalizaba a las once de la
noche rezando al Santísimo. No solo se ocupaba de las tareas de limpieza y
comida de la parroquia, sino que también ayudaba a un seminaristas, que era de
San Juan. Hasta que se recibió de sacerdote.
Siempre estaba con un carácter de suma alegría.
Buscábamos
todos los medios para ayudar al padre Víctor, hasta comprábamos semanalmente
varios jóvenes juntamente con la señorita
Feliciana, un billete de lotería con la esperanza
de lograr dinero para paliar los gastos, pero nunca sacamos nada,
evidentemente la obra de Dios, comprendimos con el tiempo, se hace basándose en
esfuerzo y de sacrificio.
El
Padre Víctor se agotaba tanto en las tareas sobre todo de albañil, que sabía
sentarse al fin del día en un sillón con su rosario y breviario, hasta el
siguiente día.
En
el frente de la parroquia, se coloco una imagen de Jesús misericordioso hecho
en cerámica, pero debido a que su devoción,
según la revelación de la hermana Faustina Kowalska, estaba en vía de
aprobación, tuvo que ser
provisoriamente tapada hasta tanto se lograra la aprobación de la devoción.
Eran
famosos los asados que se realizaban y las busecas, siempre preparado por un
grupo de persona que lo hacia asiduamente,
encargado del tema era el Sr. Murthag al que secundábamos, con las mujeres concurrentes, como la Sra. de
Nahin, de Demarco, de Castro, Valenzuela, Sta. Teresa .etc., se preparaba para
ciento treinta personas aproximadamente, el Padre Víctor era insuperable en el
corte de las cebollas.
Para
cocinar las busecas y
realizar los asados, siempre se contaba con al presencia entre otros de
los señores, Valenzuela y Murthag, los cuales terminaban agotados
por cuanto se trataba de un numero importante de personas,
y de los que ayudaban a servir Demarco, Paternostro (Gerente del Banco
Nación), Ponce (Comisario de la Cria. 39) , el dueño de la tienda del (Palacio
del Inca) Durante, Urejola etc. Es destacable que estas personas ciertamente
importantes no dudaban en ponerse a servir. . Evidentemente ello respondía al
actuar del Padre Víctor, que daba ejemplo de servicio.
Si
quedaba comida se enviaba al Colegio de las hermanas que atendían chicos huérfanos
y/o pobres, todo se aprovechaba.
Debido
a la cantidad de feligreses, actividades y en la circunstancia, que se vendía
un terreno lindero en el cual funcionaba una caballeriza para el transporte de
soda, se iniciaron las acciones adquiriéndose
el mismo, gracias a la ayuda de Dios y el esfuerzo de los feligreses,
como así también el del centro de comerciante de villa Urquiza. Siempre en
estos casos de tramites de compra lo asesoraba un feligrés de la Parroquia del
Carmen que tenia una Inmobiliaria que se llamaba Bassí al cual el Padre Víctor
le estaba muy agradecido pues las gestiones las realizaba de manera gratuita.
El
Padre Víctor era muy apreciado por los sacerdotes de las Parroquias vecinas y
contaba con el apoyo incondicional de Monseñor
Leaden, quien cada tanto venia a celebrar la Santa Misa dominical,
circunstancia en la cual se encontraba en la oportunidad
en que fue notificado telefónicamente
al término de la misma, del hecho trágico acaecido en la Parroquia
San Patricio, donde fueran asesinado los religiosos
paolotinos entre los que se encontraba su hermano sacerdote.
Se
creo un circulo de amigos de la parroquia de Jesús misericordioso, cuyo
presidente era Luis Nahin, el cual fue de vital importancia
en la vida de la parroquia y de sostén para la actividad que
desarrollaba el padre Víctor.
En
dicho terreno el padre Víctor
impulso la construcción de un salón para las distintas actividades de la
parroquia, en el se realizaron todos actos de festividades, sociales de la
Parroquia.
El
padre Víctor le asignaba al salón un lugar muy importante para la integración
de las personas, al grupo parroquial y a la aproximación
hacia, Cristo, puesto que al acudir a los actos, muchos alejados por
muchos años del camino de Dios, se fueron
de alguna manera acercándose a la causa, inclusive se compartía con los
creyentes y no creyentes, como así también de otras religiones como
el caso de los de origen judíos, llamados por sobre nombre el loco
Marcos y Mauricio, quienes también colaboraban de distintas maneras con el
padre Víctor.
Esta
obra de construcción también demando en su realización años de esfuerzos, a
manera de ejemplo se destaca que no solo el padre Víctor, hacia tareas de albañilería
sino también de electricista, pues los caños de luz del salón
con antelación a la colocación del hormigón fueron realizados por el
mismo y colaboradores.
Lo
negativo y siempre como sucede en Las cosas de Dios, fue que determinadas
personas impulsadas vayan a saber porque motivos, solicitaron a la Curia la
remoción del Padre Víctor de la Parroquia, porque consideraban entre otras
cosas que no se había aprovechado bien los predios con la edificación
realizada, hechos estos que motivo que el padre Víctor presentara un escrito en
la Curia, puntualizando las razones de su proceder, rebatiendo las imputaciones
que se le hacían, con lo cual se puso fin a la situación dejando en el Padre Víctor,
la amargura imaginable y el camino de espina que también tuvo que recorrer.
La
Legión de Maria dio un impulso espiritual y social muy efectivo, pues además
del impulso religioso la devoción a la Virgen y el rezo del Santo Rosario, se
asistió a enfermos y necesitados de ayuda espiritual en sus domicilios, como así
también se concurrió a Hogares Geriátricos de la Zona y Hospitales como el
Dr. Ignacio Pirovano, Ricardo
Gutierrez, etc. Asimismo se presto todo tipo de colaboración al Padre Víctor.
El
Director Espiritual era el Hermano Michelino,
Jesuita de la Parroquia del Salvador y los integrantes eran en su mayoría
Jóvenes Universitarios que acudieron al llamado de la Madre Celestial a través
de la Legión, eran Silvia Liguori, los hermanos Carlos y Marcelo Mangoni,
Fernando ,Maria Teresa y María Ines Urcula, Osvaldo Abad, Alberto, José Luis
Demarco, Alejandro y Gabriela,
Greco, Alicia, Valentina Becar.etc.
En
el fondo se hizo una sala de reunión, donde se sabían reunir los integrantes
de la legión de María, el Circulo de Amigos de la Parroquia y el Apostolado de
la Oración. También funcionaba como biblioteca, con libros cedidos por las personas
y previamente clasificados para su lectura. A continuación se hizo una
pieza que era utilizada como depósito, el padre Víctor sabia comprar elementos
de comidas no perecederos al por
mayor, que la gente luego compraba por su bajo costo y/o en alguna necesidad la
cedía sin más.
Arriba
de esta edificación existía una habitación
y otras pequeñas dependencia, que fueron ocupadas transitoriamente por
un paisano del padre que colaboraba en la parroquia, de nombre Mateo, a quien
conocía de su pueblo natal Croacia y con quien había estado junto en Campo de
Concentración.
Con
antelación a esta construcción, se había
hecho un gran fogón, en el cual además de utilizarse para cocinar se lo
empleaba para la quema de algún desecho. Cierto día estando realizando estas
tareas algunos de los colaboradores, se inicio un fuego que termino con un
incendio, para apagarlo tuvieron que
venir los bomberos que actuaron por varias horas para extinguirlo, como
resultado de ello, se quemo la sala de reunión y la biblioteca afectando la
estructura de esta ultimas dependencias, por lo cual hubo que restaurarse.
El
Padre Víctor, pese al impacto de
la situación, no dejo de reconocer la labor de los bomberos y en agradecimiento
les entrego dos cajones de sidra, este era un gesto muy
natural de él en cuanto a saber ser agradecido, aún en situaciones criticas.
Sabia
repetir en el deseo del bien al prójimo y de solidaridad un dicho campesino de su
tierra que siempre lo tengo presente “Rogad a Dios que llueva en el campo del
vecino para que también llueva en el tuyo”
En
medida que transcurría el tiempo, se llenaban los espacios tanto el del
reciente terreno adquirido y el del templo de materiales, superaba mas la
entrada de los elementos que las salidas, muchos concurrían
en los tiempos libres a colaborar con el padre, pero otros criticaban y/o
se incomodaban por la imagen de
deposito, pero el padre Víctor siempre decía que gracias a estos elementos
pudo en parte afrontar los gastos que
demandaba la obra y el mantenimiento de las actividades parroquiales. Es cierto
que jamás impulso a la gente al
aporte de dinero, sino por el contrario dejo
librada la contribución a las posibilidades
de cada uno.
Cada
día resultaba en ese entonces, más necesario la tenencia de un vehículo para
el movimiento de los elementos que se recogían en la vía publica y/o lo
donaban los feligreses, de forma tal que se adquirió una vieja camioneta
chevrolet, este fue todo un acontecimiento y sorpresa para el padre Víctor,
pues no se esperaba tal obsequio por parte de la feligresía, se hizo un acto
similar a la botadura de un buque importante, dado que un día domingo y luego
de la misa de once, le fue entregada la unidad, se hicieron discursos en la
calle y se rompió sobre el capo de la misma una botella de champaña. El
disfrute fue total porque sabíamos lo que este medio le significaba al padre Víctor.
Luego se la cambio por un rastrogero usado con cierta antigüedad y por ultimo de
otro más moderno.
Los
actos religiosos misas, procesiones etc. Contaban
siempre con gran cantidad de personas y significativa devoción, como así
también de hechos muy particulares como la de haber peticionado dos personas
mayores terminar el ciclo de su vida frente a
la imagen de Jesús Misericordioso, hecho estos que se cumplieron.
Asimismo aparecieron en los bancos de la capilla en distintas oportunidades dos
armas, presumiéndose que fueron dos casos de arrepentimiento.
Durante
la Noche Buena y Navidad como así también se pasaban por los parlantes de la
Torre del Oratorio villancicos y en estas festividades se realizaban reuniones a
la media noche como si fuéramos la gran familia ya que algunos se encontraban
solos.
Así
fueron pasando los años y la parroquia adelante, no obstante el padre Víctor,
siempre tenia la idea de levantar
una iglesia amplia, deseo
este que ya la tenia, cuando tuvo que emigrar precipitadamente de su
país (Croacia), ya que en una oportunidad mostró el plano de un templo que
quería erigir en su tierra, pero que por disposición de Dios y circunstancia
de la vida no lo había podido concretar.
La
providencia hasta el presente le había, permitido que ese sueño fuera
realizado en forma parcial, dado que él quería un templo mucho más grande que
hasta el momento realizado. En lo que hoy es el descanso del Peregrino.
Surge
entonces la oportunidad de adquirir dos propiedades continuas que hacían
esquina en Pedro Ignacio Rivera y
Miller , ideal para levantar el templo por el deseado.
Contaba que con antelación a la compra de los predios, una mañana al ir
a oficiar misa al Colegio de las hermanas Croatas, paro la camioneta y desde su
interior bendijo los terrenos, pidiendo a Dios que de ser conveniente se
concretara la compra.
Con ayuda de la curia,
en 1965 se compraron los terrenos ubicados en la y comenzó a prepararse el
proyecto para el nuevo templo, que recién comenzó a construirse en 1976.
Durante ese lapso la edificación existe fue utilizada como depósito de toda
clase de elementos que eran clasificados y vendidos para obtención de fondos
con el fin de ser utilizado en la construcción del templo. Asimismo y como
parte de las parcelas eran de tierra, el Padre que aprovechaba todo lo que Dios
le brindaba, hizo una quinta con todo tipo de hortalizas, tomates, lechuga,
zanahoria, etc, con lo cual la
gente que concurría al lugar siempre era abastecida con verduras.
Cuando se obtuvieron los
permisos municipales de construcción, quien colabora activamente entre otros
fue el Secretario de Obras Publicas, Arquitecto Losi, vecino de la zona. El
Padre Víctor, con la ayuda de vecinos, se encargó de demoler las viejas
construcciones y con los ladrillos recuperados hizo los muros del subsuelo (hoy
llamado cripta), que sería destinado a un salón de actos. Fueron años de
sacrificio, solidaridad, entusiasmo y confianza en Dios. Muchos feligreses
recuerdan al Padre Víctor en su vieja camioneta recorriendo las casas buscando
materiales donados por los vecinos. Durante tantos años de duro trabajo descuidó
su salud y en enero de 1984 debió ser internado dos meses.
A fines de 1985 fue
inaugurado y bendecido el nuevo templo por el Cardenal Juan Carlos Aramburu.
El Padre Víctor asistió ya muy enfermo, pero feliz por ver realizado su sueño
de edificar una parroquia en honor a Jesús Misericordioso. El 2 de octubre de
1989, mientras el número de fieles seguía creciendo, falleció Víctor Vincens.
Apenas tres años más tarde, a causa de las multitudes y curaciones, el Cardenal
Antonio Quarracino declaró Santuario a esta parroquia.
Con
el aporte de la Curia, la gestión
de compra fue realizada por el titular de la Inmobiliaria BAZZI, quien
conocía al Padre desde la Iglesia del Carmen.
Verdaderamente
el padre Víctor era un hombre especial :
Por
su fe, no renegó en su patria a la causa de Cristo, cuando fue tomada por los
comunistas, y tuvo que salir de Croacia, estar en campo de concentración,
soportar las vicisitudes propias de tal lugar
y llegar al nuestro, en una época conflictiva para la iglesia católica
Argentina.
Acudía
siempre en ayuda espiritual y material de acuerdo a sus posibilidades de todo
aquel que lo requería o que consideraba que
la necesitaba, sin esperar nada a cambio.
Por
su tenacidad, en los emprendimientos nunca se rendía, pese a todos lo
contratiempos no se daba por vencido hasta
el logro del cometido que perseguía.
Por
su entrega, no escatimaba esfuerzo
por la causa de Dios ni se tomaba descanso ( durante su tiempo de servicio, jamás
tomo vacaciones),vivía se puede decir como pordiosero, dado que se desprendía
de todos los elementos materiales y subsistía con lo básico e imprescindible
siempre decía, como realmente fue, que se estaba consumiendo, como una
vela, en el altar de Dios.
Además
de párroco de Jesús Misericordioso, era capellán de un colegio de hermanas
croatas, en el barrio de Belgrano, las cuales para determinadas celebridades
religiosas acudían a la parroquia. Entonces todo los días de la semana concurría
a oficiar misa a las seis (6) de la mañana y luego lo hacia a las 7,30 en
nuestra parroquia.
Dejaba
de lado sus deseos personales, y acataba
las directivas de sus superiores, pues cuando vino a la Argentina pensaba que
iba a estar con gente de la colectividad croata, pero lo designaron en la
parroquia del Carmen y allí se
desempeño,
Su
idiosincrasia ciertamente difería de la nuestra, de forma que poco a poco se
fue asimilando a nuestra manera de ser, su personalidad si bien, a veces
resultaba fuerte, no dejaba de atraer
amistad a su figura. Dado que se desvivía por ayudar al prójimo, era común
verlo, en acudir presurosamente a quien lo demandaba por razones espirituales
y/o, personales y en
tareas en casas de algunos feligreses como el del Sr. Mario Demarcado, gran
colaborador, queridos por todos y que falleciera trágicamente. También cuando
la Sra. de Castro destacable persona que vivía todas las inquietudes de la
Parroquia, tuvo que refaccionar su casa. Etc.
Sobre
el padre Víctor a manera de las anécdotas ya contadas y en lo que a mí me
toco vivir, puedo narrar lo siguiente:
Cierto
día en que lo acompañe a realizar una compra de semillas a la germinadora
porque quería sembrar en el
terreno donde se iba levantar el santuario, pues desde el instante que se
adquirió hasta la etapa de edificación pasaron como dos o más años, nos
encontramos con el Padre Lombardero, este comenzó a abrazarlo, tutearlo y
decirle: "COMO TE VA VICTOR", no se lo podía sacar de encima, este que tenia un
carácter especial, guiñaba el ojo
y se mataba de risa, sabiendo de la
sobriedad del Padre, que a todos
trataba de Ud. El
Padre Lombardero admiraba su
obra y lo quería mucho.
Contaba
que estando en el campo de concentración en un ámbito reducido de una manzana
y en la que dormían todo apretujados, cierta noche por el lloro constante de un
chico, un paisano increpó fuertemente a la madre para que hiciera callar el niño
y que el indignado lo hizo callar a este hombre por su proceder, sobre todo
teniendo en cuenta la situación en que atravesaban.
Siempre
en misa, les sabia decir a las madres que no se incomodaran si los chicos
lloraban, pues ello alababan a Dios
a su manera y que correspondían que los demás feligreses supieran superar
estos inconvenientes.
Tenia
en mente que de levantar un templo grande habría en el lugar especifico
separado por vidrio, para madres con chicos a fin de estar tranquilas y
no inquietar al resto de los feligreses.
En
una oportunidad fallece, un feligrés, lo acompaño para el responso,
previamente antes de salir en el rastrogero, cargo el Padre, cuatro botellas de
extracto de jugo de naranja, porque era
una noche de mucho calor, yo me quería morir, el velatorio de este feligrés
era en la casa y jamás pensé en ir un velatorio con refresco, me parecía por
demás ridículo, él me decía que en la vida había que ser practico, cuando
ingresamos con las dos botellas cada uno todos nos miraron, las entrego y al
rato todo los asistentes estaban tomando refresco. Termino con un y vio.
En
otra oportunidad siendo un día
domingo a la tarde y estando clasificando ropa,
la mayor de las señoritas Dourrón, Sara, le pregunto por su mama y él
contestó que hacia dos meses que había fallecido, ella le dijo entonces como
no lo había comunicado y el padre Víctor guardo silencio. (él era así con
sus cosas personales, sumamente reservado y
nunca dejaba trascender su situación),
lo mismo había hecho con su padre que había fallecido anteriormente y que
solo sabíamos que se llamaba José.
Tampoco
sabíamos mucho de su familia, creo que un una oportunidad dijo que eran
cinco hermanos, uno de ellos también sacerdote y una hermana medica y
que habían quedado en Croacia. Debido a la restricción y control que había en
Yugoslavia (Mariscal Tito) no podía
mantener contacto en forma directa
con ellos, de forma que las noticias que recibían sobre ellos, según contaba,
eran a través de terceros y vía
Italia. En una palabra no quería cargar con sus penas a
ninguna persona.
En
otra circunstancia y cuando se
estaba haciendo una pared lindera del salón, vino el vecino de la vivienda
continua que era también feligrés, a decir
que el todavía era joven y que quería vivir, el padre Víctor no entendía
nada, el señor sonriente le contesto que el motivo de sus vicisitudes era un
tramo de la pared que habían
levantado, la cual serpenteaba peligrosamente hacia su casa, la misma la había
hecho un albañil que cada tanto tomaba alguna copa de mas, de forma que el
padre se remango la sotana y la rehizo. Silvano el albañil solamente recibió
un tirón de oreja, porque siguió trabajando con él en lugar de ser despedido.
Su
personalidad sajona, para nuestra
forma de ser latina, ciertamente resultaba
en determinados momento
difícil de asimilar, pero cuando uno conocía su interior y
comportamiento, se daba cuenta que su personalidad no era de la dureza que
aparentaba sino sumamente sensible y bondadoso que se destacaba en su
autenticidad en cuanto a su Fe, pensamiento y obrar,
Un
mediodía lo encuentro descargando
la camioneta, y en ese instante me hace saber, que acaba de fallecer Susana Nahin, hija de Luis Nahin, quien se
crío en la parroquia, era muy joven y luego de un largo sufrimiento, el Padre Víctor
la conoció de muy chiquita y siempre la destacaba dado que a pesar de su corta
edad ayudaba a limpiar los ladrillos que luego se utilizaban
en la construcción. En ese instante por primera vez
desde que lo conocí, lo vi romper en llanto momentáneamente, pero de
inmediato se repuso y en silencio siguió trabajando como diciendo, bueno
a pesar de todo hay que seguir.
Otra
vez también los sentimientos lo traicionaron, y delante de todos en el salón y
cuando estaba hablando en el medio
de un acto, se acordó de su familia, de
lo que quería para su feligresía y amigos y rompió también en llanto,
diciendo: "ustedes acompáñenmen que yo
are todo, les pido que no me dejen solo". Los asistentes respondieron entre
aplausos y lagrimas. Luego y cuando quedamos los últimos, me dijo yo no sé lo
que me paso no me pude contener.
En
misa y actos religiosos, en sus
predicas no dejaba de enseñar y recalcar las enseñanzas de Jesús, a los
feligreses los inducía a ser cada
día más perfecto y a los que acudían por
diversas razones de amistad, pero que no eran creyentes y/o habían dejado de
practicar, nunca los apremiaba en cuanto al conocimiento y cumplimiento de la
doctrina, sino que con su ejemplo y forma motivaba que con el tiempo las
personas que se encontraban en ese estado, poco a poco se acercaban a la causa
de Cristo. Me acuerdo de un señor de
unos 60 años, de apellido Arpe, que manifestó
con lagrimas en los ojos y abrazo al Padre Víctor, él haberse
reintegrado a la comunidad católica, luego de muchísimos años de haberla
abandonado.
LA
CRONOLOGÍA DE NUESTRO SANTUARIO ES LA SIGUIENTE
- 1956-1962: Funciona el Oratorio de Betania del Sagrado Corazón.
- 1962: A partir del 8 de septiembre es elevado a la categoría de
Parroquia.
- 1965: Se compra el terreno ubicado en Pedro Ignacio Rivera 4591
(esquina Miller) con el fin de levantar el nuevo Templo.
- 1976: Recién se comienza la construcción y el 2 de abril bendice la
piedra fundamental Monseñor Guillermo Leaden.
- 1985: El 28 de diciembre es inaugurado y bendecido el Templo,aún
sin terminar, por el Cardenal Juan Carlos Aramburu. El Padre Víctor
asiste, ya enfermo pero emocionado y feliz, a este evento.
- 1988: Monseñor Jorge Canale consagra el Templo y el Altar, ante una
gran cantidad de fieles y vecinos, siendo en ese momento responsable
administrativo de la Parroquia el Padre Guillermo Cambiaso, ya que el Padre Víctor
se encontraba muy enfermo.
- 1989: Mientras “su” Parroquia sigue creciendo en fieles y
actividades comunitarias, el 2 de octubre fallece el Padre Víctor.
- Al Padre Cambiaso lo sucede el Padre Osvaldo Santagada y es durante
su gestión que la Parroquia es elevada a la categoría de Santuario, el
12 de junio de 1992, por decisión del Cardenal Antonio Quarracino.
Ya Jesús Misericordioso no recibe solamente la veneración de un
barrio, sino que trasciende a nivel nacional y comienza a recibir
peregrinos de todo el país.
- 1994: Al Padre Osvaldo Santagada lo sucede el Padre Norberto Marcet,
quien produce importantes arreglos en el antiguo Oratorio, hoy llamado
“Descanso del Peregrino”. El Santuario se instala dentro del vecindario
no sólo como un lugar dedicado a Dios sino que comienza a atender, además,
las inquietudes y necesidades del barrio.
- 2003: El 9 de marzo comienza su labor como párroco el Padre
Gustavo Manuel Gallino, recibiendo un Templo que ya resulta chico
para recibir a la cantidad de peregrinos que se acercan los días 26 de
cada mes a celebrar a Jesús Misericordioso. Y más aún, para el día de
la Fiesta Patronal, Día de la Misericordia (domingo siguiente al
domingo de Pascua).
- 2004: El día de la Fiesta Patronal, domingo 18 de abril, se inaugura
la “Fuente de la Misericordia” siendo bendecida por Monseñor Jorge
Lozano, Obispo Auxiliar de la Zona de Devoto. Ese día también se
realiza la primera Procesión con la imagen de Jesús Misericordioso
por las calles del barrio.
Nota: lo escrito, responde a datos obtenidos en Internet y a parte de las vivencias que he ido recordando como feligrés desde mi niñez. Interpreto que es bueno hacer una reseña y reconocimiento a la labor del padre Víctor, como ejemplo de un santo varón de características muy particulares, como así también que los feligreses de la parroquia conozcan las raíces y vicisitudes pasadas, del esfuerzo de los que les precedieron para llegar a la fundación del Santuario de Jesús Misericordioso, bajo el amparo de Dios y la Santísima Virgen María, a quien el padre Víctor tanta devoción tenia.
De considerarse conveniente incluir en este sitio vivencias y/o hechos sobre la vida del padre Victor como del Santuario de Jesús Miserdicodioso se solicita su remisión a [email protected] , desde ya muchas gracias.